Nuestro segundo día en la capital alemana amaneció muy muy temprano, a eso de las 4 o 5 de la mañana, y te preguntarás por qué, pues porque como dije en el post 17 cosas que me sorprendieron de Berlín, amanece muy pronto y atardece muy tarde en verano, por lo que te aconsejaría llevar antifaz.
Tal como te explicaba en el post de nuestro primer día en la ciudad (Berlín – East Side Gallery, Alexanderplatz, Catedral de Berlín y Puerta de Brandenburgo), este segundo día visitaríamos uno de los lugares que nos había traído a Berlín, el Campo de Concentración de Sachsenhausen.
Excursión Sachsenhausen
El Campo de Concentración de Sachsenhausen fue construido en 1936 por prisioneros de otros campos de concentración. Entre 1936 y 1945 más de 200.000 presos pasaron por este campo de concentración. Los primeros prisioneros eran adversarios políticos del régimen nacionalsocialista pero, más tarde, comenzaron a apresar también a algunos grupos que los nazis consideraban inferiores tanto racial como biológicamente, como testigos de jehová o gays.
En agosto de 1945 el Campo de Concentración Sachsenhausen se convirtió en un campo especial soviético. Durante los cinco años que el campo estuvo en funcionamiento pasaron 60.000 prisioneros, de los que más de 12.000 no lograron salir con vida.
Nosotros decidimos hacer esta excursión con Vive Berlin una empresa de tours que realiza esta visita de forma gratuita porque consideran que es una visita merece una buena explicación y no un simple paseo por las instalaciones, y la verdad es que su explicación fue fantástica: del lugar, del por qué los Nazis llegaron al poder, de la arquitectura, como vivían y morían,… Una excursión de 6 horas en la que al final decides cuanto pagar (al principio debes pagar 1,20 € por persona para la fundación)
Recomendamos 100% hacer esta excursión o otra con precio fijo como esta Excursión al Campo de Concentración de Sachsenhausen. Lo que podrás ver del Campo de Concentración es insuficiente (fue parcialmente demolido) y es mejor disponer de una explicación de lo que había y de lo que ocurrió.
Por no frivolizar no daré más explicaciones sobre el lugar, te dejo algunas fotos, aunque tampoco hicimos muchas, la verdad es que no era apetecible y estábamos muy atentos a las explicaciones.
Cómo llegar en transporte público a Sachsenhausen: hay que tomar el tren con destino Oranienburg, son las líneas RE5, RB12 y S1. Desde la estación hasta el campo, tendrás que caminar unos 20 minutos o tomar el autobús 804. Necesitarás un billete de transporte ABC de día (transporte público en Berlín).
Volvimos a Berlín sobre las 16 horas y seguimos conociendo la ciudad.
Potsdamer Platz
Potsdamer Platz, es una de las plazas más bulliciosas de Berlín, arrasada durante la Segunda Guerra Mundial y partida en dos por el Muro de Berlín (aun se pueden encontrar trozos del muro).
En Potsdamer Platz se puede encontrar:
- La réplica del primer semáforo que funcionó en Europa, de forma manual.
- Un doble adoquín para marcar donde pasaba el muro
- El Sony Center, un centro comercial.
- El Panoramapunkt, el ascensor más rápido de Europa.
De aquí fuimos hasta el Parlamento Alemán con la intención de «hacer un Última Cena de Milán» (dícese de ir a un lugar sin tener entrada, tener suerte y poder entrar, puedes leer nuestra experiencia en este post VISITAR LA ÚLTIMA CENA EN MILÁN), y si, lo hicimos again! esta vez no fue intradía, si no que nos dieron entrada para dos días después, pero nos cuadró bien con nuestro planning (puedes leer nuestra visita en BERLÍN – PARLAMENTO ALEMÁN, POTSDAM Y COMPRAS).
Monumento del Holocausto (Cora-Berliner-Straße 1)
El Monumento al Holocausto fue nuestra siguiente parada. Es una extensión enorme llena de bloques de granito de diferente tamaño. A través de sus laberínticas «callejuelas» quisieron simbolizar la desorientación, la confusión… de las horribles persecuciones que llevaron al genocidio perpetrado por el régimen Nazi.
En el sótano hay un centro de visitantes con exposiciones sobre el genocidio y sus víctimas, gratis, pero nosotros decidimos no visitarlo.
Bunker de Hitler (In den Ministergärten, 10117 Berlin)
Actualmente hay un parking donde estuvo el bunker donde Hitler se suicidó el 30 de Abril de 1945 tras la entrada de las fuerzas soviéticas en la ciudad. A día de hoy no queda nada, tan solo un panel informativo que no lo conseguimos encontrar. La verdad es que el lugar no merece una visita, pero que quedaba de camino y por eso nos acercamos.
Topografía del Terror (Niederkirchnerstraße, 8.)
Detrás de un trozo del muro se encuentra un solar con una enorme cantidad de información y fotografías de toda la historia reciente alemana. Es un lugar al que le tendrás que dedicar mucho tiempo si es un tema que te interesa, todo esta muy bien documentado, eso si, en inglés.
Check Point Charlie
Llamado Charlie (Letra C del alfabeto de la OTAN) por ser el tercer control aliado en abrir tras la creación del muro, fue la principal entrada para extranjeros y diplomáticos entre los dos Berlines de 1961 a 1990.
Es un lugar curioso y debería de ser especial como otros lugares de Berlín, pero no lo es. Check Point Charlie está montado tipo feria barata, hay dos hombres disfrazados de militares americanos con los que te puedes hacer una fotografía previo pago y todo son risas y alegría, no nos gustó este lugar.
Desde aquí decidimos volver a nuestro hotel a descansar un rato. Luego volvimos a salir a cenar al famoso Curry 36 (puedes leer sobre él en nuestro el post de Dónde comer en Berlín) y a tomarnos una crepe mientras paseamos por calles berlinesas, una buena manera de acabar nuestro segundo día en la ciudad.
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2 Comments
Gracias Nuria por el gran trabajo que realizas, facilitándonos tanto a los que amamos tanto viajar como tú.
Al igual que tú, tuvimos el placer de visitar el Campo de Concentración de Sachsenhausen con unos guías españoles de https://tourgratis.com/tour/free-tour-berlin-sachsenhausen porque teníamos la necesidad de conocer al detalle toda la historia y donde mejor que allí. Pese a la dureza de la historia por los sucesos realizados en el campo, sin duda creo que es una parada obligatoria para todos los que visiten la ciudad para concienciarse y velar para que no se vuelva a repetir dichos sucesos.
Gracias de nuevo.
Un saludo.
Hola Juan Diego,
Gracias por tu recomendación. Yo también creo que la visita sin un guía que te sitúe en el momento de la historia y explique lo que sucedió no es suficiente.
Saludos,
Nuria